Dicha presentación se realizó en la Biblioteca Justo José de Urquiza.
DISCURSO DE PRESENTACIÓN - CRISTINA VALIDAKIS
PRESENTACIÓN DEL LIBRO:
“GRITOS DE BRONCE”
RODOLFO M. LEMOS GONZÁLEZ
Siempre he creído que presentar un libro es una tarea humilde y un acto
de servicio. ¡Debe serlo! Y esto es así, porque quién lo hace, en este caso
quién les habla, asume ciertas responsabilidades a saber:
La primera es la de transmitir, de alguna manera y con lealtad, su
pensamiento genuino acerca de la obra expuesta ante los interlocutores.
La segunda responsabilidad, aunque no en orden de importancia, es con el
autor, que ha contado con uno para esta tarea, y el deber es, ser lo más
objetivo posible sobre su labor como un acto de servicio, más allá del vínculo
que con el mismo nos una, y donde el
verdadero protagonista es el autor y su obra.
El autor: Rodolfo Lemos González.
La obra: Gritos de Bronce
Y voy a priorizar al autor, porque el mismo, es mucho más que su obra:
BIOGRAFÍA.
Hablar de autor y obra son hechos
indisolubles, porque si bien el autor es más que su obra, como ya dije, la
misma refleja su visión del mundo, su formación, su trayectoria vital, la
ideología, las necesidades, los sueños del autor. También es el producto de
horas dedicadas a su producción, a tiempo robado a otros aspectos de su vida.
Una obra es vida, tiempo y espíritu de
su autor.
Y es imposible comenzar a hablar de
“Gritos de Bronce” sin remitirse a su predecesor en esta saga “Las campanas de
Potosí”. Y acá se hace necesario contarles como conocí a Rodolfo. Coincidieron
varias circunstancias, personales de su vida, y de la mía, como ocurre siempre
que dos personas se encuentran, nunca por azar. Y también gracias a otros
vínculos que se tienen en común, en este caso, la amiga que compartimos Mirta
Bono, presente hoy acompañando nuestras
trayectorias, a quién le agradezco tantas cosas compartidas.
Continuando con este
relato, conocer a Rodolfo y sentirse impregnado de historia y cultura, es
inevitable. Como también quedar impresionado por la profunda sabiduría que hay
en sus palabras, cuyo sustrato principal son los años de intensa lectura y
análisis de obras, principalmente de clásicos de la literatura. También me
pareció increíble, su sentido crítico a la hora de abordar la historia de
nuestro país. Entonces fue inevitable que mi “ser docente” se impusiera, y le
pedí que se sumara al proyecto que desarrollábamos en la Escuela del que soy
autora y coordinadora: “Tras las huellas del Autor” y nos presentara su libro.
Rodolfo, este es el
regalo que te hacemos en devolución a tu trabajo en la Remedios. VIDEO
Y ahora sí,
para adentrarnos en la presentación que nos ocupa, debo incursionar en una
etapa difícil, dolorosa de nuestra patria: “La guerra de la Independencia” Una
guerra, que al decir del propio Rodolfo a través de su intensa investigación,
duró 15 años, en los cuales nuestra Argentina se “desangró” y perdió millares
de sus hijos. Había pasado muy poco tiempo de la Revolución de Mayo y este
“primer grito de libertad” sólo sería el origen de una interminable batalla
plagada de relatos de dolor, valentía y heroísmo. Y allá estaba el horizonte, como
una promesa esperanzada de forjar un nuevo país, sin olvidos de nada y ambición
de todo.
Con la vista
puesta en este horizonte de esperanzas, Rodolfo Lemos plasma en este libro
historias reales, verídicas, contadas con amenidad y colorido, avaladas por la
documentación pertinente y para ofrecernos con total claridad este panorama
controversial de peleas, traiciones, angustias, pérdidas, en el solar del
nacimiento de nuestra libertad. Los hechos relatados plasman con total
veracidad no sólo la historia de los grandes héroes, los que conocemos desde
nuestras trayectorias escolares y lectoras, sino las anécdotas y vivencias de
otros héroes desconocidos y anónimos sumergiéndonos totalmente en las épocas descritas, y en los
sentimientos más profundos de los protagonistas.
Por eso, en
“Gritos de Bronce” hay matices indagadores, planteos vivenciales, profundamente
humanos, afirmaciones inéditas y experiencias de vida poco conocidas, pero
cuyos dilemas son de absoluta actualidad. Dilemas sobre el amor, la lealtad, la
vida, la muerte. Heroicas entregas para defender la patria, pero también para
preservar lo cotidiano.
“Nuestros hogares son sagrados” dice a gritos la esposa del
coronel Arce que sale a la calle a enfrentar a los españoles de la mano de su
hijo, y es derribada a tiros por los godos en Cochabamba. Y no puedo dejar de
pensar, al leer relatos como éste, en que cada uno de sus protagonistas eran
personas comunes, como yo, como vos, como ud…
Imposible es, no quedar atrapados por las experiencias de “La
Señora de los ojos celestes”, una mujer como tantas pero que jamás imaginó el
destino que la vida le reservaba a ella y a sus seres queridos y las pérdidas
irremediables que debería enfrentar en pos de la independencia.
“Gritos de Bronce” en sus distintos relatos, como
continuación de la saga iniciada con “Las campanas de Potosí” está impregnada
de frases exaltadas de ternura, de miedo, de amor, de valor, llevándonos a
vivir todo aquello que hizo amar y sufrir a sus personajes.
Y
aquel mirar hacia el horizonte de la libertad, del que les hablé al principio,
no queda encerrado, sino que imitó el vuelo del viento y Rodolfo ha conseguido
seguirlo en su viaje.
Vuelo de cerca… al corazón de cada protagonista.
Vuelo de lejos… para llegar a entender a lo largo de cada
historia los destinos de nuestra Patria.
No soy crítica literaria, ni me corresponde en este momento emitir mi
propia interpretación de lo narrado. Pero puedo decir, sin querer hacer
valoraciones borgianas, que en “Gritos de Bronce” hay una absoluta honradez
intelectual, sobriedad y elegancia en el lenguaje, formas claras y eficacia
didáctica para los interlocutores. Por eso, estoy segura que estos relatos, no
sólo por su calidad dialéctica, sino por el espíritu que los impregna, están
destinados a volar y no a dormir en estanterías, y seguirán clamando con
fervor, cuánto costó a aquellos que otrora hicieron que ésta, fuera una patria
libre. Desde Gritos de Bronce, hasta “El Ocaso de un Héroe” volaremos en una
secuencia de entrañables aventuras. Las aventuras de los héroes anónimos de
nuestro acrisolado pretérito nacional.
Para finaliza, este libro en mi humilde opinión plasma, lo
que dice Felix Luna:
“…la historia de la gente común, en sus vicisitudes
cotidianas: hombres y mujeres que en su anónima humildad elaboraron día a día
la compleja urdimbre del país que tenemos…”
Que nos sirva para
entender nuestras raíces y construir nuestro futuro como país.
¡Los invito a volar!!
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